Viene 2010.
¿Qué espero?
Salud, éxito, sorpresas y amor para mis seres queridos.
Lo mismo para los lectores de este blog (también son mis seres queridos).
Lo mismo para mí (¡yeah!).
"And the world peace..." jejeje, diría Miss Simpatía.
MIS CUATRO FAVORITAS
1. Revolutionary Road (Sólo un sueño)
a. Porque es “Lo que hubiera pasado con Rose y Jack después del Titanic”
b. Porque es una película partemadres: te hace pensar muchísimo. Salí emputado del cine.
a. Porque Russell es encantador y tiene frases memorables “Hola, me llamo Russell”. “Usted sí que es inteligente, ¡viaja con toda su casa…!”. “Caratatas del paraíso”
b. Porque es conmovedora y tierna… y es de Pixar
3. (500) Days of Summer (500 días con ella)
a. Porque la pareja protagónica es encantadora
b. Porque la estructura es ingeniosa y permite a la movie mantener su ritmo. El clímax es descorazonador (¿existe la palabra?). La edición es encomiable.
a. Porque tiene un ritmo, una edición y una musicalización pocamadre
b. Porque el musical del final tiene ondita
c. EXTRA: Porque… Jai Ho!
MENCIONES HONORÍFICAS
a. Porque Mickey Rourke da una cátedra de actuación. ¡Ese final!
b. Porque Darren Aronofsky (Pi, The fountain) deja de intensearle y presenta una historia donde la genialidad reside en su sencillez
6. Harry Potter and the Half Blood Prince
a. Porque es Harry Potter… y la historia cada vez se pone mejor
b. Porque la vi en función de medianoche… bimbo
7. The Reader (Una pasión secreta)
a. Porque lloré como María Magdalena en el cine.
b. Porque fue la primera movie que vi en Galerías Atizapán (el cine que abrieron a tres minutos de mi rancho)
8. My Sister's Keeper (La decisión más difícil)
a. Porque la vi un día muy especial (3 de julio)
b. Porque es altamente lacrimógena y tiene canciones chidas (“Feels like home”)
c. EXTRA: Porque el corrector de Word, cuando uno escribe “difícil”, en automático lo quiere cambiar por “fifí”.
a. Porque todos protagonistas actúan de pocamadre
b. Porque fue un ejemplo de buen cine mexicano.
10. Happy-Go-Lucky (Una dulce vida)
a. Porque me identifiqué con la protagonista (es teacher)
b. Porque es MUY optimista
No, no estoy deprimido, todo lo contrario.
La culpa del nombre tan emo de esta entrada –que en algún momento se planteó como la primera de la historia de este blog- la tiene Marcelo Ebrard.
El asunto jala así: para todos los capitalinos que tooodos los días suben (o bajan... porque en algún momento tienen qué hacer una u otra cosa) por avenida Constituyentes, al poniente de Mecsicousiti, es común ver o transitar por estas vueltas en “U” casi invisibles, pero con un nombre por demás horrible: “Retornos deprimidos”.
Chaaaale. ¿Acaso nadie pensó en ellos? ¿Nadie pensó en sus sentimientos O en los sentimientos de quienes transitan por ellas? ¿No hubiera sido mejor bautizarlos como “Vuelta en U invisible”, o “Vueltas Bicentenario"?
Bueno, yo digo.