lunes, 10 de agosto de 2009

Primer día de clases

Como alumno es una pesadilla. Aquel que lo niegue:
a) Está drogado
b) Es un ñoño
c) Es un ñoño que está drogado

No hay más. Punto.
En mis épocas de alumno prepo (hace... muchos años) mi opción -pa' qué negarlo- regularmente era la "b". No podía evitar que me gustara regresar a clases. Pero la noche previa siempre era lo mismo. La misma pesadilla. La misma pinche pesadilla: soñaba que llegaba tarde.
Era horrible: de entrada, no me podía dormir. Ya que lo conseguía, por ahí de las 2-3 de la mañana, empezaba la tortura imaginaria: el arribo sin zapatos (¿por qué uno no puede soñar que olvida otra cosa?); la mezcla de compañeros de varias escuelas, de patios de varias escuelas y de profesores de varias escuelas; y, como siempre, la llegada tarde a clases. Aunque ahora que lo recuerdo, mi peor pesadilla pre-clases sucedió cuando soñé que no podía dormir. ¿Les ha pasado?
Este año fue distinto. Sí: soñé que llegaba tarde a clases; pero lo soñé de la noche del sábado al domingo. Privilegios de la docencia: un día de ganancia.

3 comentarios:

  1. jajaja bien hecho, tal y como lo prometiste :D

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  2. Qué extraño, yo también sufría de insomnio post-escuela, pero era porque siempre me daba mucha emoción regresar a clases. Siempre pensaba: Este año, será mi año, sacaré muchos 10´s y cuidare mis colores. Lo malo es que para el final del día ya me habían regañado dos veces por no poner atención y mi color azul (obvio el favorito) se había dado a la fuga.

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  3. jajaja ya ves edgar y a mi que me criticabas por ser ñoño; muy tarde pero gracias por los saludos en lo de la graduacion

    revisando tu blog me di cuenta que no has mencionado una sola vez a los guajolotes y eran tus animales favoritos cuando nos dabas clases que paso con ellos??

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